A raíz de lo ocurrido recientemente en la gala de los Oscar con Will Smith y Jada Pinkett Smith ha salido a relucir un problema médico que existe desde siempre, pero del que apenas se habla: la alopecia femenina.
Pese a que normalmente la alopecia se relaciona con el género masculino, se calcula que el 30% de las mujeres sufrirán algún tipo de alopecia a lo largo de su vida. Existen diferentes causas por las cuales una mujer puede sufrir pérdida del cabello, como son causas genéticas, la interrupción de las hormonas, hipo o hipertiroidismo o trastornos autoinmunes, como es el caso de Jada Pinkett. También es posible sufrir cierta pérdida de densidad en el cabello a causa del estrés o de falta de ciertas vitaminas y minerales.
Esta alopecia femenina de causa autoinmune es el propio cuerpo el que destruye los folículos pilosos y hace caer el cabello. Esto puede ocurrir en zonas concretas del cuero cabelludo -normalmente en formas redondas- o en todo el cuero cabelludo, y lo hace de forma sorpresiva.
El tratamiento no siempre es efectivo. Existen tratamientos orales con corticoides inmunosupresores, pero al final es el propio sistema inmune del cuerpo el que decide cuándo deja de atacar los folículos pilosos. La consecuencia de esto es que puede pasar un período de tiempo prolongado hasta que el cabello vuelve a crecer. Por este motivo muchas mujeres que sufren esta alopecia deciden raparse la cabeza o utilizar pelucas.