Las orejas de soplillo es una deformidad congénita que afecta al pabellón auricular, que además puede provocar graves problemas psicológicos, sobretodo en los más pequeños. Una sencilla intervención quirúrgica, la otoplastia, soluciona el problema, y libera a las personas del peso de la diferencia.
Los niños son los que están más afectados psicologicamente por esta deformidad congénita, ya que no están preparados para sufrir las bromas y ridiculización por parte de sus compañeros. El defecto puede deberse a una falta del pliegue del cartílago de la zona del antehélix, que da una apariencia de oreja sumamente extendida y plana. En otros casos es la concha auricular la que está excesivamente desarrollada en su porción de unión con el cráneo, dando el efecto que las orejas están demasiado separadas. Esta deformidad puede ser tanto bilateral como unilateral.
La intervención quirúrgica de las orejas de soplillo, es bastante sencilla, de corta duración , que se realiza bajo anestesia local y sedación en adulto, y anestesia general en niños. A partir de los 6 o 7 años, un niño ya puede ser intervenido de las orejas en asa, ya que el tamaño de las orejas de un niño de 7 años es igual al de un adulto.
Últimamente parece que se está publicitando algo que se llama EARFOLD y que se vende como la otoplastia sin cirugía, o cirugía mínimamente invasiva. Quizás esta operación pueda servir para los que como yo, no nos hacemos a la idea de pasar por quirófano.