Es posible que hayas notado que tu piel está más seca desde la llegada de la menopausia. Esto es totalmente normal, ya que esta etapa tiene consecuencias significativas en el cuerpo de la mujer, incluida la calidad de la piel.
Te explicamos qué efectos tiene la menopausia sobre la piel y te damos algunos consejos y tratamientos para paliar estos efectos.
Efectos dermatológicos de la menopausia
La vida de la mujer se encuentra marcada por una serie de períodos fisiológicos muy determinados:
- pubertad
- embarazo
- menopausia
- vejez
Estas fases se asocian a profundos cambios físicos y psíquicos.
En la menopausia, la piel sufre cambios significativos.
La deficiencia estrogénica, es decir la falta de estrógenos, provoca una serie de cambios orgánicos, que incluyen un descenso del colágeno cutáneo y por tanto el envejecimiento de la piel.
Perdida de firmeza
La piel está regulada por las hormonas, por los estrógenos. Si tenemos un descenso de estrógenos esto va a marcar decisivamente ciertas características en nuestra piel. Puntualmente va a afectar:
- al grosor de la piel
- a su hidratación
- a su pigmentación
- y a la regulación de la cantidad de sebo
Además, los estrógenos favorecen la renovación de las células de la dermis, que es esta capa que está debajo de la epidermis -la capa más superficial de la piel- y estimula la síntesis de las fibras de colágeno y elastina de la dermis de esta capa más superficial.
El colágeno es uno de los constituyentes principales de la piel y le otorga resistencia y elasticidad.
Se comenta que, del peso en seco de la piel humana el colágeno representa entre el 70% y el 80%. También es el componente mayoritario de la dermis por lo que, en la menopausia, la disminución de la producción de estrógenos va a provocar una aceleración del envejecimiento cutáneo.
Manchas
Sabemos que hay dos tipos fundamentales de envejecimiento cutáneo.
Uno que va a depender más de causas externas extrínsecas, como son las radiaciones del sol, por ejemplo;
- rayos infrarrojos
- rayos ultravioletas
Estos últimos son muy importantes en el fotoenvejecimiento.
Igualmente importantes son nuestros hábitos de conducta diaria habitual:
- el tipo de dieta
- consumo de tabaco
- alcohol
- drogas
- tener una buena hidratación
- el descanso nocturno.
Sequedad
Y luego tendríamos este envejecimiento que podríamos llamar más intrínseco -más interno- y que va a depender, pues, de factores genéticos y no del paso del tiempo.
Por otro lado, existe cierto componente genético que va a influir. Y es un factor decisivo:
- qué tipo de fototipo cutáneo tenemos
- qué tipo de piel
- determinadas enfermedades cónicas.
¿Por qué se seca la piel durante la menopausia?
A nivel ginecológico, el déficit de estrógenos va a ser muy relevante de cara a la menopausia.
Niveles de estrógenos
La pérdida de estrógenos a nivel cutáneo también puede provocar:
- vulvodinia atrófica
- líquen escleroso vulvar.
Vulvodinia atrófica
La vulva atrófica es un problema universal de la menopausia y va a tener un gran impacto en la calidad de vida de nuestros pacientes, porque este descenso de estrógenos va a llevar a una atrofia a la vagina y a la vulva; se va a adelgazar el epitelio que la recubre, haciéndolo más fácilmente irritable y, como consecuencia, va a favorecer la aparición de infecciones.
Además, con el déficit de estrógenos,
- va a cambiar la microbiota de la vulva, se va a volver más indefensa
- va a cambiar el PH vaginal, va a ser menos ácido, favoreciendo infecciones.
Las pacientes van a experimentar:
- sensación de quemazón
- picor
- dolor con las relaciones sexuales
Liquen escleroso vulvar
El liquen es una enfermedad crónica, autoinmune.
No todas las pacientes en la menopausia van a tener liquen escleroso vulvar, aunque se ha visto un pico de incidencia en esta edad.
Obviamente las manifestaciones clínicas van a depender del estado de la paciente, pero en general las zonas más afectadas van a ser la zona anterior de la vulva, todo lo que rodea el clítoris, incluso la zona cercana al ano
¿Qué van a ver estos pacientes?
- unas zonas más pálidas y adelgazadas
- la piel más finita y más atrófica
- incluso lesiones de rascado.
Es fundamental que nuestras pacientes se miren la vulva y, si no lo hacen ellas, al menos que el ginecólogo la explore con detenimiento, haga una historia clínica y una exploración física detallada para poder diagnosticar esta enfermedad.
Tratamientos dermatológicos para la menopausia
Si ponemos el foco en la zona extra genital, lo que vamos a encontrar es una disminución significativa del sebo cutáneo.
También los típicos sofocos, baja la temperatura cutánea en algunas áreas, aumenta la permeabilidad vascular y ya tenemos la clínica de enrojecimiento y aumento de temperatura.
A nivel morfológico, por las características que hemos explicado antes, por la alteración a nivel de la epidermis, de la dermis y de la disminución de la cantidad de colágeno, lo que nos vamos a encontrar es aumento de arrugas y de los pliegos cutáneos.
Dieta antiinflamatoria
Aunque realmente no existe una profilaxis para el envejecimiento cutáneo hormonal, podemos adquirir hábitos saludables. Por ejemplo, una dieta antiinflamatoria rica en vegetales, evitando la obesidad y el sobrepeso.
Tratamiento hormonal sustitutivo
Si una mujer está pasando por un déficit de estrógenos, un tratamiento hormonal sustitutivo puede ser muy beneficioso para intentar, en la medida de lo posible, paliar parcialmente los efectos que estos déficits.
En el tratamiento hormonal hay que hacer una historia clínica y una exploración física detallada. Hay que valorar a la paciente de manera individual y, en el caso de que sea necesario, habría que sugerir hormonas bioidénticas, es decir, estructuralmente iguales a las que produce el cuerpo. Esto implica que sean no sintéticas y no progestinas y evitar el paso hepático -la vía oral- porque esta vía incrementa el riesgo de trombosis.