El linfedema es una disfunción del sistema linfático que produce una acumulación de liquido en el espacio intersticial con acúmulo de macromoléculas.
Durante el proceso oncológico el paciente puede pasar por distintas fases que pueden producir una modificación del sistema linfático, ya sea por la cirugía donde en muchos casos hay que extirpar ganglios linfáticos provocando una disfunción del sistema si las vías linfáticas principales, reduciendo el trasporte del líquido y destruyendo la funcionalidad de dichos canales. Otro de los principales motivos es la radioterapia, en la que se produce una agresión directa sobre la zona radiada y pueden verse afectados tanto los ganglios como las vías. Un tercer caso y menos común es la quimioterapia, que debido a su cardiotoxicidad hace que el sistema circulatorio sea más deficiente afectando al sistema linfático de una forma indirecta. En muchos de los casos hay una combinación de los tres causantes por lo que el paciente tiene posibilidades de generar un linfedema secundario oncológico.
La fisioterapia oncológica es una especialidad de la fisioterapia encargada de prevenir, tratar o paliar las secuelas físicas producidas durante el proceso oncológico. El linfedema es una de las mayores disfunciones para el paciente postoncológico por lo tanto se ha de realizar un abordaje desde un tratamiento de fisioterapia especializado.
En Clínica Planas contamos con la unidad de fisioterapia oncológica dirigida por Curro Millan, dentro de la Unidad Integral del Linfedema, donde el abordaje del paciente es global. No solo hay que realizar un tratamiento conservador del linfedema, sino que también el paciente ha de tener en perfecto estado su movilidad, sus cicatrices, la fibrosis axilar, los cordones axilares, y el tono muscular; acompañado de una planificación global. Todo esto ha de estar controlado por el departamento de actividad física, de nutrición además del apoyo psicológico.
Curro Millan recomienda que todo paciente tiene que estar revisado después de cada proceso y tratado con la fisioterapia oncológica especifica de cada momento. De esta forma podemos prevenir el linfedema y minimizar casi todas las secuelas con drenajes, movilizaciones, tratamiento de la fibrosis, cicatrices y musculatura, proporcionando gran calidad de vida al paciente.