La grasa propia es un arma que el cirujano plástico utiliza cada vez para más cosas. No solo se aumenta una talla de sujetador o se consigue unos glúteos redondeados, sino que también se llega a remodelar el rostro y utilizar las propiedades de sus células madre para mejorar la calidad de la piel, mediante la Lipoestructura facial .
Lipoestructura facial
La técnica de infiltración (injerto) de grasa propia (autóloga) se viene utilizando en Clínica Planas desde el año 1998 con muy buenos resultados, tanto a nivel estético como reparador. “Se trata de injertar grasa del propio cuerpo, en el momento en que se extrae (no se puede guardar en nevera y ponerla dentro de una semana). El método es simple: se saca grasa de donde sobra… y se coloca donde falta. ¿La cantidad? Siempre depende de lo que se necesite rellenar: no es lo mismo un mentón que toda la cara”, apunta el Dr. Jorge Planas. “El problema que tenía esta técnica hasta mediados de los 90 era que, si se inyectaba toda la grasa sin centrifugarla ni depurarla, la mitad del volumen no era grasa viva. Esto significaba que, además de durar menos, esa mitad ‘no viva’ creaba un pH más ácido que dañaba a su vez a la parte “buena” que se inyectaba, provocando una mayor reabsorción.” Hoy el problema ha desaparecido, ya que solo se inyecta la grasa viva. ¿Y cómo se inyecta esta grasa? A través de filamentos de grasa, como si fueran filas de hormigas. Se utiliza una cánula pequeñita, dejando ir el filamento, pero evitando que el siguiente filamento esté en contacto con el primero, creando así una especie de red de filamentos en diferentes planos. Requiere anestesia local o sedación. No hay efectos secundarios (no hay puntos de sutura), salvo una ligera hinchazón que dura unos días.
La que dura… dura
El hecho de depurar la grasa ha garantizado una supervivencia a largo plazo de los injertos grasos. La que dura, dura siempre. Está claro que el 100% del volumen inyectado en la lipoestructura facial no sobrevive. Sin embargo, todo lo que sobreviva más de un año, sobrevive para siempre.
¿Dónde me la pongo?
Más recomendada para dar volumen que para quitar arrugas del rostro, la grasa autóloga se inyecta en pómulos, surcos nasogenianos, mentón, rebordes mandibulares y labios. Puede ser una infiltración de carácter reparador (rostros con defectos congénitos como, por ejemplo, un mentón retraído o una malformación nasal), o también una infiltración anti-edad: “Cuando envejecemos, perdemos grasa. La superficie de la piel es la misma, pero se descuelga y cae al perder grasa (por eso la piel de las manos de los ancianos es casi transparente delatando huesos, arterias y venas… la grasa se ha ido). Así, infiltrando grasa propia se puede aumentar volúmenes en puntos muy precisos como todo el reborde malar (pómulo) y el reborde mandibular de manera que siempre haya soporte”, afirma el Dr. Jorge Planas.
Natural 100%
Se podría decir que la grasa autóloga que se utiliza en la lipoestructura facial es el mejor material de relleno y el menos nocivo para el organismo, ya que se trata del tejido graso propio del paciente. Al utilizarse para restaurar y dar volumen, evita la utilización de materiales sintéticos o semisintéticos que pueden ocasionar posibles complicaciones de extrusión y/o reacción a cuerpo extraño, con el consiguiente rechazo posterior.. Las zonas más agradecidas: mentón, pómulos, arco mandibular y en la intersección entre nariz y pómulo. La grasa se introduce entre el músculo y el hueso, porque ahí vive más y da más soporte.
Me han hecho una blefaroplastia con muy mal resultado. Me han extirpado completamente la grasa, como me dijo” a ras de músculos orbicular” . Ahora tengo los ojos hundidos y muy arrugados. Estoy desesperada y quería saber si existe alguna posibilidad de solucionarlo. Rellenando con grasa o de alguna manera. Por favor estoy pasando un infierno. Ayúdenme
Apreciada Maria, lamentablemente en su caso sería necesario que un doctor le visitara para realizar una exploración y así poder sopesar las diferentes opciones que se disponen para su caso en concreto debido a la naturaleza de este. Le facilito el teléfono de la Sra. Silvia Fernández, coordinadora general de Clínica Planas, por si estuviera interesada en solicitar una visita; su teléfono es el 93 203 28 12 extensión 100. Agradecerle la confianza que ha depositado en nosotros. Un saludo cordial