Ultrashape, paso a paso
La tecnología Ultrashape, es especialmente eficaz a la hora de eliminar la grasa localizada mediante disparos o haz de ultrasonidos, permite la destrucción de células de grasa. Esta máquina incorpora un sistema de cámara de posicionamiento global y una pantalla mediante la cual el especialista visualiza en tiempo real la evolución de la sesión y está sobretodo indicado para las zonas como el abdomen, muslos o cartucheras, flancos, parte interna de piernas y rodillas.
¿Cómo funciona?
Primero de todo, se debe realizar una analítica previa para determinar el perfil lipídico del paciente, en el que se realizarán medidas pretratamiento, un mapa topográfico (dibujo) para el control del área a tratar, además de una delimitacion de la grasa con unas bandas elásticas. Con una cámara de posicionamiento global, el sensor registra la superficie, con su relieve y su grosor correspondientes. Asimismo, los disparos de ultrasonidos son controlados por el sistema, que registra automáticamente las áreas tratadas y las no tratadas. Respecto al número de disparos, suele ser de 1000 para una zona como el abdomen, 200 para flancos, 400 a 600 para trocanteres.
Los resultados
Al finalizar el tratamiento con ultrashape, se percibirá una discreta disminución de volumen. La pérdida de centímetros sin embargo, se objetiva a medida que la grasa destruida va siendo eliminada por el organismo. Los resultados de este avanzado tratamiento se visualizan ya en la primera sesión, en la que se pueden obtener una pérdida mínima de 1 cm a 2,5 cms de contorno como media. Una vez acaba la sesión, que tiene una duración de poco más de dos horas por cada área seleccionada, el paciente puede reincorporarse inmediatamente a su actividad laboral, y se pueden realizar tantas sesiones como sean necesarias; las sesiones aconsejadas dependen siempre de la persona y el volumen de grasa pero se recomiendan tres sesiones dejando un mes de descanso entre ellas.